 La Asociación Argentina de Actores, preocupada por la situación institucional en que se encuentra el I.N.T. al no confirmarse la continuidad de Raúl Brambilla, o en su defecto, quién sería el nuevo director de ese organismo, se reunió hace más de veinte días con el Secretario de Cultura Jorge Coscia para tener una voz oficial al respecto, además de tratar otros temas relacionados con nuestra actividad gremial. Con respecto al cargo del director en el INT, el Secretario de Cultura, de quien depende el nombramiento, nos manifestó que lo haría público apenas lo resolviera, para lo cual necesitaba evaluar propuestas que tenía en estudio.
Más allá de este trámite, que no debería insumirnos más preocupación que la de saber lo antes posible quien será el interlocutor válido en la relación de nuestro sindicato, en tanto y en cuanto representante de los actores, con la institución que maneja el fomento a la actividad del teatro independiente nacional, se ha generado en las últimas horas una conflictividad que excede esta situación.
A partir de trascendidos y advertidos por algunos compañeros de una supuesta situación anómala generada en el seno del Consejo del Instituto Nacional del Teatro, el día 15 de febrero nos hicimos presentes en la sede del INT con la intención de presenciar la reunión de dicho consejo para tener información de primera mano, saber que estaba sucediendo y poder aportar nuestra posición como representantes de los actores. Por resolución de ese Consejo que en votación decidió negarnos la posibilidad de presenciar la sesión, no pudimos entrar.
Somos respetuosos del funcionamiento y de las decisiones orgánicas, por lo tanto nos retiramos, pero sin renunciar a exigir a las autoridades saber lo que está ocurriendo, pedido que fue hecho telefónicamente ese mismo día.
A todo esto se le suma la reciente noticia de la renuncia presentada por Raúl Brambilla el pasado 18 de febrero.
Es imprescindible la urgente comunicación oficial al respecto si no se quiere entrar en una espiral de especulaciones, de confusiones y de interpretaciones políticas de los hechos que oportunamente han denunciado en forma personal algunos teatristas, y que para ser serios en nuestra posición no podemos dar por cierto o negarlos sin cotejarlos.
Estaremos del lado de los actores siempre, en contra de cualquier intento de desestabilización de la institución que debe dar respuestas a la actividad del teatro independiente, del lado de la exigencia de transparencia de los actos de las personas que lo conduzcan, en contra de la burocracia y a favor de la participación democrática y efectiva de los únicos y verdaderos protagonistas: LOS TEATRISTAS INDEPENDIENTES.
No nos haremos eco de intereses personales, de noticias surgidas de una agencia de información clandestina, ni de los que intenten manipular políticamente un conflicto que deberemos resolver los teatristas junto con sus entidades representativas.
Esperamos las respuestas requeridas.
CONSEJO INTEGRAL
ASOCIACIÓN ARGENTINA DE ACTORES
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